¿Está a punto de elegir un país europeo para trasladar a su familia o su empresa? ¿O tal vez busca una jurisdicción para crear una empresa? Tradicionalmente, los países europeos tienen unos impuestos elevados. Sin embargo, hay un matiz: los impuestos exigidos por las leyes pueden ser superiores a la cantidad realmente pagada si se cumplen ciertos requisitos. Además, los países europeos tienen sistemas fiscales diferentes, no son uniformes en absoluto: ¡el tipo impositivo puede variar del 9% al 35%! Como ve, necesita tener información suficiente para tomar la decisión correcta, y nosotros podemos ayudarle a conseguirla. Siga leyendo para descubrir más.